Denominaciones de Producto

La calidad y la singularidad de las cerezas del Valle de Las Caderechas está reconocida por su Marca de Garantía, concedida por el Instituto Tecnológico Agrario de la Junta de Castilla y León.

Este distintivo asegura que las cerezas han sido cultivadas, recolectadas y comercializadas cumpliendo unos exigentes parámetros de calidad y respeto al medio ambiente. El consumidor puede identificar las frutas producidas mediante una etiqueta fijada en las cajas, en la que figuran el nombre y logotipo, además del número de trazabilidad del producto que permite conocer de qué parcela proviene y todo su proceso de producción.

Se comercializan una decena de variedades, cada una con distintas características de sabor, olor y presencia. Las principales son la Fresona y la Negra Tardía, compartiendo terreno con variedades como la Burlat, Stark Hardy Giant, Summit, Sunburst, Lapins, Rainier, Van y Garrafal.

El Comité de Control supervisa todo el proceso y un Grupo de Cata examina el olor, el sabor y la presencia de las cerezas comprobando que son los establecidos por el reglamento de la marca. Ambos organismos garantizan que la fruta llega al consumidor en perfectas condiciones para su consumo.

Finalmente, las cerezas se recolectan a mano, sin intervención de medios mecánicos. La elección de la fecha de recolección es primordial puesto que las cerezas no maduran una vez arrancadas del árbol. Los fruticultores del Valle se basan en su experiencia, y en la cata y análisis in situ de la acidez y azúcares para decidir cual es el mejor momento para comenzar la recolección.